La Red Natura 2000 la conforman una red de espacios protegidos declarados para conservar determinadas especies y hábitats que viven en ellos, siendo más de 27.000 en toda Europa.
La importancia que tiene no sólo radica en las numerosas especies de animales, plantas y hábitat que protege: como el águila imperial ibérica, el oso pardo, el lince ibérico, el quebrantahuesos, el visón europeo, la cigüeña negra, el abeto o el haya; sino que también es un símbolo de la interacción cultural e histórica hombre-naturaleza.